Nuestros químicos han eliminado el 95% de las emisiones de disolventes de nuestros recubrimientos al agua para el diseño y la durabilidad de las superficies metálicas. Todos los recubrimientos industriales Renner no contienen formaldehído, por supuesto. El formaldehído puede provocar irritaciones en las vías respiratorias y los ojos, especialmente en personas alérgicas y asmáticas. En 2001, la Organización Mundial de la Salud estableció que el límite máximo de concentración de formaldehído en el entorno doméstico es de 100 microgramos por metro cúbico (equivalente a 0,1 partes por millón - ppm). Este límite máximo se adoptó en Italia en 2008 (Gaceta Oficial nº 288). En 2004, el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC) clasificó el formaldehído como cancerígeno.